Por Diego González
Follow @ElDiegoNoExiste
Colo-Colo acaba de cumplir 90 hermosos años. Años donde han pasado un montón de cosas. 2 finales de Copa Libertadores. Una robada descaradamente y otra ganada a puro corazón. Una Recopa. Una Interamericana. 10 Copas Chile. 30 títulos nacionales. Una final de Sudamericana.
Entre Platko, Jozic, Borghi, Benítez, ‘Zorro’ Álamos y el mismo Tapia algo hemos aprendido de buenos desempeños.
Entre Arellano, Sorrel, Caszely, Chamaco, ‘Cóndor’ Rojas, Mat14s, Vidal, Lucas, Suazo, Paredes, algo hemos sabido de Cracks.
Hemos pasado tantas glorias que dudo que haya más de 20 clubes en el mundo que puedan contar tantas glorias.
Sin embargo no hemos estado ajenos a discretas campañas y presentaciones que todos preferimos olvidar.
Aún recuerdo cuando fui a ver el partido de vuelta con Deportivo Pasto y nuestra presentación solo era comparable a las presentaciones del Inter de Juanita Aguirre en la cancha de tierra que queda al frente de mi casa en Conchalí. Había un silencio peor que sepulcral en Cordillera, que solo se interrumpió por un señor de unos 60 años que gritó desde el fondo de las entrañas » MIRENSE LA CAMISETA. ESTAN EN COLO-COLO, CORRAN CON GANAS.» Aun se me hace un nudo en la garganta recordando eso.
Pero de ambas experiencias se ha creado con ambas cosas. Pero no puedo quejarme en nada contra Colo-Colo, ya que la gran mayoría han sido alegrías. De hecho no recuerdo casi ninguna campaña discreta o partido tan malo que me haga olvidar las inolvidables vueltas olimpicas que he vivido.
Gracias por tanto David Arellano. Perdón por tan poco.