El hincha, ese que tiene la facultad extraordinaria de elevar jugadores discretos a la altura de ídolos por solo un partido y de matar ídolos por un error. El que tiene esa bipolaridad superlativa de jurar amor eterno y fidelidad a prueba de todo cuando el equipo está haciendo buenas campañas, pero si a la semana siguiente no se juega bien todos son malos, todos son cagones y ninguno merece estar en Colo-Colo.
Por: Erick Zavala Follow @zaavalaerick
Terminada la final de Copa Chile, cuando había que apoyar luego de la inmensa tristeza que se vivió, muchos prefirieron empezar a destruir todo, a darle al que estaba en el suelo. Me detengo acá para primero hablar del DT. Porque puedo concordar con las críticas a Sierra, que si bien el partido de ayer lo planteó bien, su falta de autocrítica ha provocado molestia entre los hinchas, y es entendible. No obstante, leer que se le trate hasta de hijo de puta, reflota en mi esa sensación de que ningún referente o ídolo de Colo-Colo debería volver al club como DT. No para tener que perder ese sitial bajo el amparo de una campaña discreta.
Dicho eso, volvamos a lo principal. Qué pena me dio leer como despedazaban a Martin Rodríguez, el mismo que muchos elevaron al sitial de digno portador de la 14 después de Matías Fernández, hace un par de meses. Ese mismo que ayer jugó en una posición que no es la suya, el mismo que recibió dos patadas de tarjeta roja más varios cariñitos de los jugadores azules. El mismo que estuvo a una uña de Herrera de marcar el empate. Leer cómo lo trataban de cagón, pecho frio y tantas otras cosas, me provocó hasta vergüenza de ser parte de esta hinchada “incondicional”. Claro, es fácil ser incondicional cuando se va primero y se juega bonito.
Para ser hincha no hay manuales ni fórmulas, tampoco creo en los más o menos hinchas, solo creo en la consecuencia y que eso nos define como personas. Al equipo, al DT y a los jugadores se les critica cuando no se juega bien, eso es obvio, pero primero se le da la mano para levantarlo y seguir adelante. Para criticar hay mucho más tiempo.
De todo corazón espero que seamos campeones el domingo, este equipo no merece quedarse sin nada. De todo corazón espero ver celebrar con este equipo a todos los que lo mataban ayer. De todo corazón espero que sea con un gol de Martin Rodríguez. De todo corazón espero ver a Sierra besando la Copa.
Este amor no es para cobardes.
¡Vamos Colo-Colo!
