Autor: Alejandro Trincado S. Follow @jano_trincado
No es ninguna novedad que las lesiones en el plantel de Colo Colo están agotando la materia prima que poseía en los albores del campeonato. Y como no recordar lo que pasó el semestre pasado con Héctor Tapia cuando las bajas en el equipo conllevaron al fracaso en todas las competiciones.
Todos los problemas comenzaron en el partido con Deportes Iquique cuando Paulo Garcés y su luxación en el hombro, lo obligaron a dejar el campo de juego y dar paso a Justo Villar. Luego, en el mismo compromiso fue la lesión de Martín Rodríguez y esto luego de que fuera victima de un planchazo en el empeine que lo dejó con heridas que tuvieron que ser tratadas con seis puntos. No conforme con eso, luego fue el turno de Humberto Suazo, quien en el partido con Antofagasta tuvo que salir antes del primer tiempo. Después Justo Villar, quien venía de recuperar el arco tuvo ciertos problemas que serían tratados con unos exámenes para zafar de dudas. Finalmente los exámenes arrojaron edema muscular, una pequeña contractura. De hecho podría jugar la vuelta con Coquimbo Unida en el campeonodromo.
Y debemos considerar también que hoy recién pudo debutar Paulo Díaz, quien también se había lesionado a principio del semestre.
Lo bueno de esto es que se van probando mas variantes en la cantera, tal es el caso de Álvaro Salazar quien viene de jugar en Barnechea luego de un préstamos. El golero jugó la mayoría de los cotejos pero aquella campaña los llevo a ser colistas del torneo y por consecuente el descenso.
La lesión de Chupete dio paso para que ingresa Andrés Vilches y asi poder ir probando variantes en la delantera.
Otro que aún no vuelve es el paraguayo Leonardo Cáceres, quien llegó a principio de año y que se desempeño de buena manera en la era de Tito Tapia.
Así con las tediosas lesiones. Ojala no sigan invadiendo la atmósfera alba para poder concretar el cometido que todos ansiamos, el titulo numero 31.
