Autor | Alejandro Trincado Follow @jano_trincado
Imagen: La Cuarta
¿Han pensado que sería de Colo-Colo sin Justo Villar? Primero, no hubiésemos podido bajar las últimas estrellas (30`y 31`) y seríamos un equipo con un camarín muy inmaduro. Más encima, el paraguayo es un símbolo dentro y fuera la cancha, un caballero.
Este hombre es el responsable de que nuestro equipo tenga una base dentro de la columna vertebral que nos sustenta. Es un tipo fantástico que nos salva partido a partido de un desastre de proporciones. Encuentros que en años anteriores perdíamos por paliza, ahora los empatamos o los ganamos 1-0, con él como máxima figura.
Es un espectáculo verlo atajar y volar en los pastos del Monumental. Es el mejor refuerzo que ha tenido en años el “Cacique” y seguramente nos hará falta cuando se retire del fútbol. Donde ha estado dejó huella y en nuestro país no ha sido la excepción.
No ha mermado su nivel en ninguno de sus partidos. No recuerdo haber escuchado alguna crítica por algún mal desempeño. Simplemente es un crack por sus capacidades y condiciones que no se dejan esconder.
El guaraní es pieza clave dentro del esquema del “Coto” Sierra. Es el único que luce dentro de un planteamiento bastante lento y fome de observar. Sí, es fome el estilo de enfrentar los partidos de ex director técnico de Unión Española. Pero eso da para otra columna.
El protagonista de este relato es para mí el mejor jugador que tiene Colo-Colo, ya que ha demostrado respeto por la institución, no ha expresado ganas de irse y además quiere retirarse en el recinto de Pedrero, siendo que con los reflejos, dignos de un cadete, bien podría terminar jugando en Europa o bien en un fútbol más competitivo.
Aporta experiencia, madurez, mesura, responsabilidad, profesionalismo, solvencia, prestancia, altura, jerarquía, oficio, frialdad, liderazgo y firmeza en el fondo “Albo”. Desde sus pies parte el fútbol pues siempre le da salida al equipo. Es fundamental e imprescindible, por lo menos para mí. No hay un arquero como él. Cuánto tiempo estuvimos sufriendo porque no teníamos un guardameta que nos diera plena garantía. Los que vienen a la memoria son Sebastián Cejas y Cristian Muñoz, después de ellos, todos prescindibles.
Este tipazo le quita un peso enorme a Sierra. Para mi debe ser el capitán del equipo pues es un ejemplo impresionante. Ojalá no se retire y tenga cuerda para rato. Ojalá no se muera nunca y sea inmortal en el arco de Macul. Ojalá no se saque el indio del pecho y no se vuelva a lesionar.
No queda más que agradecer la entrega, el empuje y el coraje que demuestra en cada entrenamiento y partido en el que participa. Es un jugador muy valioso y debemos tenerlo super presente. Es por él que estamos donde estamos. Es por él que no nos meten cuatro o cinco goles.
