Por Diego González
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Hasta hace solo un par de días me dejaron de llegar insultos y respuestas termocéfalas a un tuit que calificaba de hinchas de cartón a los que se empezaron a despedir del título cuando perdimos con Cobresal y que yo solo podía despedirme del campeonato cuando quedaramos a más puntos del líder de los que quedan en juego.
Sí, puede ser que mi comentario este desprovisto de toda frialdad. Pero a Colo-Colo yo le voy a tener fe hasta el final. He estado en los momentos más feos del club, cuando no le ganabamos a nadie y hasta nos llamaron #ColoCoListas. ¿Por qué nos alejaremos ahora de la esperanza? Colo-Colo «representa nuestra raza sin igual» ¿y acaso no es nuestra raza la que ha resistido todo tipo de tragedias naturales? ¿Se rinde nuestra raza al ver la adversidad? ¿Arranca al ver las pruebas de la vida? La respuesta es NO.
La victoria ante Audax Italiano solo nos mantiene en pelea, aún falta que Cobresal pierda y empate en los próximos 2 partidos. Está dificil. Pero no voy a dejar a Colo-Colo JAMÁS. Ni aunque estuviesemos en zona de descenso.
Colo-Colo no nos ha dado más que alegrias y una que otra amargura y no puedo tener otra cosa más que esperanza.
Si no somos campeones ¿ustedes creen que me sentiría mal por haber tenido fe y esperanza en el Más Grande de Chile? No. Porque es Colo-Colo y no me avergüenzo de Colo-Colo.
